jueves, diciembre 29, 2005

Easy Snap y el futuro

El lunes por la noche, día festivo en Cataluña, Easy Snap daba un concierto. La gente que organiza el festival FEA ( aquél donde Roberta triunfó como jurado y dj peligrosa el año pasado) tiene una sesión en un bar de Barcelona, y actuaron allí.
Esa misma noche quedé a tomar algo en casa de Arantxa y Alex, y también se apuntaron Bibi y Valentí, y Manel y Mónica. No comimos nada, porque todavía estábamos atiborrados de las navidades, pero bebimos cervezas y charlamos de todo un poco. Un tema curioso, cómo viven sus hijos las navidades. Para Martina, la hija de Alex y Arantxa, son las primeras con un poco de conciencia, y los hijos de Manel todavía son pequeños. En Cataluña, el día 24 por la noche se celebra tradicionalmente el tió. Los adultos ponen todos los regalos de los niños bajo un a manta, y en la cima colocan un tronquito con barretina. Ése es el tió. Luego todos los niños golpean el tronco, pidiéndole que cague ( la cultura tradicional catalana, como la francesa, es muy escatológica), y los muy benditos se creen que cuando levantan la manta, el mini tronco ha cagado una PSP, el castillo de los clics, o una nancy rubia. Claro, las primeras veces, esto de las navidades es un shock inexplicable para los críos, sobre todo porque no tiene ni idea del por qué de todo esto. Con razón, visto el resultado, Martina se pasó todo el día siguiente golpeando los muebles con un palo, pidiendo que cagaran algo…

Después debí haberme ido a casa ( al día siguiente trabajaba) pero hablé con Gerard y nos acercamos al concierto de Easy Snap. Nosotros, y bastante gente más, porque el bar estaba bastante lleno, para ser víspera de laborable. Vino hasta Álvaro, que llegó a tiempo desde San Sebastián, para darle una sorpresa a su chico.Los organizadores luego les dijeron que había sido récord de asistencia de público, pero a mi ya me vale, tres días festivos sin salir, jugando con el mac, y me tiro a la calle la noche antes de tener que madrugar.
El concierto estuvo genial. Patri y Virgili cantaron 9 canciones (no sabía que tenían tantas!), entre ellas Virgen y furiosa ¡gran título!, o una sobre Winona, la ladrona. Sonaron muy espectaculares porque aparte del portátil con las bases, traían guitarra (a la que Virgili, muy en actitud punk, le rompió dos cuerdas) , batería y un cuerpo de baile: dos primas metidas en una caja de cartón con agujeritos para los ojos – eso todavía no sé si me gustó o no… también hizo cameo PinkGlove, que cantó alguna estrofa de uno de los temas.
Al final, a la gente le gustó tanto que se tuvieron que improvisar unos bises ( repetir por petición popular algunos jits), y una versión de Salvados por la Campana que me encantó.

Al día siguiente estuve en el estudio, trabajando con los directores. En la casa hay mar de fondo con los nuevos proyectos, o mejor dicho, con la falta de ellos. El futuro de la división de animación está en el aire, y lo peor es que ahora mismo no hay ningún proyecto en cartera que quieran desarrollar, aunque sí que quieren tener la exclusividad de cualquiera de los que desarrolles…posiblemente para meterlos en un cajón. En fin, yo nunca entenderé la política de las productoras españolas. Al fin y al cabo, mi contrato es exclusivamente para la película que estamos haciendo ahora, y me encuentro como casi siempre, sin saber con certeza qué será de mi vida en unos meses. A veces te agobias, sobre todo cuando te desvelas en medio de la noche. En este proyecto, como estamos tan involucrados, cuando el día es bueno es lo más, pero un mal día es deprimente…
Hasta que bajamos a comer, y me encontré, por casualidad, con Javi, un antiguo compañero del instituto. De esos con los que fuiste uña y carne y luego la vida te separó. Era de los más populares del colegio, y cuando anteayer nos abrazamos tuve que esforzarme en reconocer algo de eso en ese señor rechoncho, miope, vestido con el esmero más preciso para no demostrar en la oficina nada de tu personalidad y encajar sin estridencias en la mediocridad de las conversaciones ( lo sé porque estuve escuchando de lo que hablaron en la mesa: fútbol y algún personaje televisivo tipo neng).
En la nuestra, la conversación era más bien sombría, sobre proyectos de futuras pelis que no sabremos si realizaremos, sobre lo cómo empezar a vender la que estamos haciendo- queremos que tengan imágenes a color final para empezar las preventas; confiamos en la reacción que puede generar la película, y que eso sirva de acicate al departamento directivo.
Vamos, futuribles inseguros, de los que tanto estresan…Pero me giraba ligeramente, a la mesa de los oficinistas, y otras opciones me hacían pensar que la vida que he escogido tampoco está tan mal. Al fin y al cabo, ¿quién sabe con certeza lo que va a pasarle en los próximos meses?