jueves, abril 01, 2004

La Técnica Topacio

A ver. Que estos días he estado muy liado, y me ha pillado el toro. Intentaré contar estos días sin que me quede una de esas entradas mastodónticas ( Ufff). El lunes, después de dibujar personajes manga, me fui para yoga. Comentamos la noche travesti, y analizamos la Técnica Topacio. Todo vino por una anécdota del plan travesti. Estábamos charlando Mario, Olvido y yo. De pronto Olvido salió corriendo a saludar a una travesti espectacular que acababa de entrar. Nosotros dos le seguimos corriendo, como si la conociéramos de toda la vida. Y cuando llegué, nos saludamos, nos besamos y todo, y resulta que no tenía ni idea de quién era. Volví a preguntarle a Nacho, y me miró como si fuera una adolescente tonta. Ésa es Topacio, una amiga de Martín Sastre que conocí en una fiesta, pero ni me acordaba. Claro, luego se reían de Mario y de mí, porque salimos corriendo como si la conociéramos de toda la vida ( Mario la conocía un poco más que yo, pero por lo visto tampoco mucho) Así que en yoga nos reíamos de eso, y le llamamos la técnica Topacio para conocer gente que te apetece, por todo el morro. Comentamos casos en los que habíamos aplicado o nos habían aplicado la técnica Topacio. Unas risas. Aparte de eso, temas recurrentes, como las aventuras de Candi Love en L.A., la vida sentimental de Alicia, etc... También hicimos una poses tremendas, que siempre cuento el choteo, y te vas a creer que sólo vamos a yoga a pelar la pava. Y no, nos curramos unas posturas de retorcerse, y respiramos, y meditamos mogollón. Al acabar la clase quedé con Urban y Quino, que hacía meses que no nos veíamos. Quedé en caso de Quino, y cuando llegué no había nadie en casa. Resulta que bajó un momento a un chino, y se dejó las llaves dentro. Así que quedamos por la Gran Vía, dónde había quedado con Urban, y nos fuimos a Lavapiés, a buscar una copia de las laves a casa de una amiga.Yo por mí encantado, así quedábamos al lado de mi casa. Al final estuvimos tomándonos unos vinos en una taberna centenaria, en la calle mesón de paredes. Quino me contó que deja su trabajo en la tienda de decoración, porque se da cuenta de que se está quedando estancado, y así aprovecha para hacer cursos de 3D, y aspirar a trabajos de interiorista, que es lo que ha estudiado. Urban esta en un impasse de éstos que te pasan en la vida, que no sabes para dónde tirar, ni qué te puede traer el futuro. Pero fijo que le sale bien.

El martes y el miércoles estuve en un estado de ansiedad continuado, porque tuve que hacer una cosa que odio, decidir. Recibí una oferta muy MUY buena por un trabajo que no me atraía mucho, en una empresa con mucho futuro, mientras por otra parte, debería rechazar la película de la que ya firmé el contrato. Es una película que me apetece más, pero en una empresa que tiene el futuro más incierto ( por ahora), y con una cargo muy bien pagado, pero menos que en la otra oferta. Vaya horas de comerme las uñas, de no dormir, de consultar a gente de la que te fías, sabiendo que la decisión última la debes tomar tú, sin ayuda de nadie, y afecta al rumbo que puede tomar tu carrera. Supongo que todos pasmos por eso en algún momento.
A la salida del trabajo, quedé con mi Mario, que hacía también días que no quedábamos, para charlar, y tomarnos unos cafés. Le conté todo ésto de las decisiones, y también me aconsejó. Nos pusimos al día de nuestras vidas, oímos música, cotilleamos y nos reímos mucho. Vamos, lo habitual. Se nos pasó el tiempo volando, con lo que nos gusta hablar, y nos lo pasamos muy bien. Al subir a casa, tuve otra conversación larga, esta vez por teléfono, de padre a hijo, sobre lo que debía hacer, y ya me metí en la cama con las ideas bastante claras.

El miércoles decidí. Espero que lo que he decidido me salga bien, y gane en el presente, y en el futuro. El día de trabajo fue un poco disperso, por los problemas de organización y comunicación con la productora, pero a nadie parecía importarle mucho, y estuvimos todos muy relajados. A la salida, a yoga. Allí me encontré con Mar, que Lorbada no pudo venir, y a la salida, Gema, Ricardo y yo salimos pitando para el Morocco, al concierto de Miqui Puig. Nacho nos hostigaba por teléfono, que llegábamos tarde. En la puerta nos esperaba, con Pablo Sycet, Pito y Luis. Entramos y el local ya estaba abarrotado. Nos encontramos con Floren, y Alejandro, el chaval batería de Los Acusicas y Fangoria. También estaba Rafa Cervera.Por allí saludé a Orlando, a Rubenimichi, a Agustín G. Cascales, a Loud, al que todavía no he visto en directo, y todo el mundo me dice que es muy bueno. Vi de lejos a Lucas Arraut, pero luego le perdí de vista, y no tuve oportunidad de saludarle. Pedro Munster nos invitó a unos tragos. Salude a Irene Prada, que iba total de David Delfín. Me contó que se iba de vacaciones de Semana Santa las repúblicas checa y eslovaca. El concierto, a pesar de problemas técnicos, me gustó mucho. Me voy a comprar el disco en cuanto pueda.
Estábamos charlando, cuando de pronto vi a Artcoholic. Venía hacia mí, y por las respectivas fotos en su fotolog y en diario gastronómico, nos conocimos. Fue muy gracioso, y sólo el primer encuentro de este tipo de la noche. Estuvimos charlando al final del concierto, con una amiga suya que creo que se llama Agatha ( ¿?), o por lo menos su fotolog se llama así. Hablamos sobre los respectivos estudios, profesiones, gustos, y demás. De ahí se iban a una fiesta organizada por un profe de Agatha, para que los alumnos se conocieran. Parecía una cosa súper freak, como de peli de David Lynch, donde siempre hay una escena con todos los personajes sentados en una sala, y uno bailando muy mal en el centro. Ya me contarán cómo se pasaron. De pronto de encuentro cara a cara con una cresta. "eres V.?“, yo digo sí, y me dice " Soy Patata“. Ya en ese momento me empecé a partir. Había venido al concierto con Mynerva, Supervago y Rul. Así que de pronto conocí a un montón de bloggeros. Mynerva se moría de risa, qué graciosa. Hablamos de nuestros parecidos con las fotos de nosotros que conocíamos, de cómo éramos in the flesh, de nuestros trabajos... Les presenté a Artcoholic, y resulta que también conocían su flog.
Pensaba en las diferencias entre los diarios de la gente y lo que transmitían en persona. Artcoholic me resultó tal y como su fotolog, con el mismo aire reflexivo, citas y links ultra cool. Mynerva era mucho más caótica y vivaracha que su blog, a Rul no le conozco lo sufiente. Supervago debe ser muy tímido, porque parece muchísimo más serio que su blog, mientras que si le lees, es mucho más divertido y cercano. Y Patata, pues Patata es tan divertida como su diario, y más. Es muy curiosa la relación entre la blogosfera y la realidad.
De pronto le enseñé a Artcoholic unas chapas de Pitita Ridruejo que me regalaron Rubenimichi, y como querá una, lo llevé corriendo a conocerles, y le dieron más. Artcoholic estaba muy contento, porque con lo tímido que es, de pronto les conocía, porque por lo visto es muy fan. Era todo como de presentaciones, de conocerse, de muchas risas. Llevé a Patata a saludar a Nacho, primer encuentro después de la mítica entrevista. Llegó Miqui Puig a saludar, y saqué la cámara para hacer un poco de diario gastronómico. Nacho se emocionó, y enroló a todo el mundo para las fotos. Vino Patata, Julio Ruiz, unos señores de discográficas... Ya verás las fotos.
Gema y Ricardo se fueron para el Jose Alfredo para cenar, y después de presentar a Nacho a los compinches de diarios, nos fuimos para allá con Rafa Cervera. Si creía que la noche había sido ya bastante divertida, todavía me esperaban más sorpresas, amiguita. En el bar estaban ellos, con Nacho Mastretta y Ajo. Si ya era fan después de oír la letra de Retorciendo Palabras, después de conocerla, puedo decir públicamnete que estoy enamorado de ella. De su salero, de su forma de hablar, de sus micropoemas. Unas risas, un escándalo, vamos. La charla fue amenísima, todo el mundo metía baza, hablamos de tantas cosas a al vez, en conversaciones cruzadas delas que entrabas y salías. Hablamos de Eliansito, de su malvada tía Marisleisis( que tiene nombre de enfermedad), de cómo es posible que a Ricardo no le caiga NADIE mal, recordando a gente y tiempos pasados no necesariamente mejores, soltamos maldades de chaqueteras que se apresuran a posicionarse con el cambio de gobierno, de qué hace cada uno cuando escucha música( Mastretta no puede hacer NADA más, mientras que Canut lo tiene que hacer TODO con música). Ajo nos recitó micropoemas, nos hicimos más fotos para otra tanda de diario gastronómico, comentamos películas recientes, hicimos terapia de grupo sobre las crisis de los cuarenta o la falta de ellas ( por cierto, pensaba en mi curiosa postura: venía de estar con gente que todavía está en la primera mitad de la veintena, y luego estaba con gente que rozaba la cuarentena. Y todos me parecían intersantes, fíjate). En fin, que estuvo divertidísmo, pero cuando ya nos caíamos de sueño, nos retiramos, que hoy toca Kraftwerk.

Al final ME HA SALIDO una entrada mastodóntica :P